En este artículo compartimos consejos para elegir un buen vino tinto. Nada preparar mejor para esta tarea que la experiencia y años de formación. ¿Cuáles son las características en las que fijarse a la hora de tomar la decisión?
A la hora de elegir un vino tinto, surgen varias preguntas. Intentamos averiguar los gustos de los invitados y repasamos nuestros propios favoritos.
El maridaje con vino tinto
Sin duda, un condicionante importante es la ocasión y el menú que se va a elaborar. Así es importante saber identificar los diferentes sabores que caracterizan cada plato. ¿Se trata de un plato contundente, dulce o más bien ácido?
Por regla general, buscaremos un vino con más cuerpo para los platos cargados, con mayor contenido de grasas. En cambio, las cenas ligeras piden un vino con menos cuerpo.
La temporada
Con el cambio de estaciones, también cambian las preferencias. Reservamos los platos más ligeros para las altas temperaturas y largos días del verano. Estos acompañan preferentemente con un tinto joven y ligero. Los platos mas contundentes del invierno piden un tinto con más cuerpo.
Cuidado con el color
El color de vino nos aporta información valiosa. Los colores oscuros y profundos apuntan a un vino tinto intenso. En cambio, colores brillantes indican un tinto fresco.
Por otro lado, conviene evitar aquellos colores que recuerdan a rojo ladrillo o café, ya que estos sin señales de la degradación del caldo.
La etiqueta
La etiqueta de una botella de vino es una fuente de información perfecta para saber más sobre su origen, y la cosecha. Podemos averiguar la variedad de uva, cuyas características decidirán si es mas adecuado uno u otro para la velada en cuestión.
También nos informará del grado de alcohol y por lo tanto, de la clase de cuerpo. Hasta un 10,5% el caldo se considera de cuerpo ligero, mientras que un porcentaje superior al 12,5% indica un vino con bastante cuerpo.